Escribe: Alessandra Portugal
Todos hemos escuchado de aquel
genio detective caracterizado por ser en extremo raro, tener problemas sociales,
un ego superior a su sensibilidad y una frase: “Elemental, mi querido Watson”.
También sabemos que sólo bastaría de una mirada rápida para que supiese decirte
de dónde vienes, qué buscas, cómo eres y a dónde vas. Ello puede representar un
escenario escalofriante para aquel que esconde algo o no le gusta enfrentarse
con la verdad; como también puede ser interesante para aquellos que buscan
aprender un poco más de la observación y del comportamiento de los demás. ¿Qué
es aquello que pasa por la mente del personaje misterioso? ¿Es posible que
exista uno parecido en la vida real? El siguiente artículo plantea 3 elementales
para el desarrollo de un pensamiento deductivo, basándose en el personaje de Connan
Doyle y del libro “Master Mind – How to
think like Sherlock Holmes”, de Maria Konnicova.