Escribe: Juan Carlos Salinas Morris
La actividad económica de hoy no sería lo mismo sin el acceso al crédito. En general, todos nosotros nos encontramos sumamente limitados a satisfacer nuestras necesidades en ciertos momentos del tiempo. Es decir, debemos esperar a cada fin de mes (o quincena) para recibir un monto fijo de dinero. Pero hay veces en que esta cantidad no es suficiente: nuestra restricción presupuestaria nos limita a tomar decisiones hoy que a valor presente son rentables. Por ejemplo, comprar una casa, comprar un automóvil o realizar el pago de una maestría.