Escribe: Teodoro Crisólogo
Indignación, frustración e impotencia. Estos son algunos de los sentimientos que genera la situación actual del sistema de justicia en el país, lo cual muestra la dificultad de los retos que le esperan a la nueva Ministra de Justicia. Sin embargo, algunas de sus propuestas brindan esperanza sobre el futuro de este sector. Y es que todo parece indicar que si la actual ministra no logra reformar el sistema de justicia peruano, al menos tratará de vengarlo. Voz Actual te trae un resumen de los planes de Marisol Pérez Tello en su nueva aventura dentro del Ejecutivo.
No es un secreto que en el Perú la justicia está jodida patas arriba. Desde jueces que dictan sentencia celebradas por pegalones y sicarios, hasta fiscales que más parecen abogados del diablo, el sistema que administra la justicia en el Perú sólo evidencia serias fallas que repercuten negativamente en el bienestar de la población. En numerosos casos (que incluyen asaltos, violaciones y asesinatos), el Estado ha sido incapaz de brindar una protección efectiva al ciudadano de a pie y esto ha desembocado en un amplio malestar popular que se ve plasmado en célebres cánticos como el de “Poder Judicial, vergüenza nacional”. Es por eso que quien administre el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (MINJUS) no sólo se lleva la desconfianza del 79% de peruanos sino que también deberá enfrentar serios problemas institucionales que convierten a la justicia peruana más en una condena que un derecho.
No obstante, la designación de
Marisol Pérez Tello (MPT) como la cabeza del MINJUS y sus novedosas propuestas,
auguran una suerte de reforma que permitiría recuperar la confianza de los ciudadanos
en el sistema que vela por sus derechos. Bueno, ¿y a qué responde esta
exacerbada percepción optimista? Son las recientes declaraciones en diversos
medios las que demuestran de alguna forma que esta nueva Ministra de Justicia sí
quiere trabajar en serio. Revisemos, a continuación, los cuatro pilares de la
reforma que plantea MPT.
Mejora
del Sistema de Administración de Justicia
En este punto, MPT ha sido
enfática en mostrar su interés por reforzar la articulación entre instituciones
del sistema de justicia, desde el Poder Judicial hasta la Fiscalía y el
Ministerio Público. La idea consiste en brindar estrategias de gestión (indicadores
y metas concretas) y tecnología a estas entidades para que faciliten el acceso
a la justicia a más sectores de la población, sobre todo aquellas que se
encuentran en constante situación de vulnerabilidad. Cuando se le pregunta a la
actual titular del MINJUS de dónde sacará dinero para este propósito, ella responde
que existen puntos de la estructura de costos de su sector donde pueden ser más
eficientes, como es el caso de los S/. 60 millones de soles que desembolsan
anualmente por conceptos de “alquileres y otros”.
Lucha
contra la corrupción
La premisa aquí es clara: hacer
más transparente el Estado, a través de un mayor acceso a la información
pública, y no tolerar actos que atenten contra los intereses de los ciudadanos.
Un Gobierno más abierto permite que la población pueda fiscalizar mejor a sus autoridades,
y a su vez facilita la labor de Procuradores al momento de identificar los
malos elementos dentro del Estado. Asimismo, MPT recalca que esta mayor
transparencia debe aplicarse en todas las instancias del Estado, especialmente
en los procesos de contrataciones y concesiones públicas donde lo que
actualmente prevalece es la cultura de las coimas y sobornos.
Cárceles
con un enfoque humano
Si el tío PNP se encarga de
atrapar a los malhechores, el MINJUS debe encargarse de otorgarles un
tratamiento penitenciario adecuado. Sin embargo, ¿es posible mantener 80 mil
presos en cárceles diseñadas para albergar un máximo de 30 mil? ¿Cómo esperar
que los presos se reformen si las cárceles se han convertido en escuelas de formación
criminal? Es una sorpresa escuchar que la actual ministra tenga en sus planes
reforzar los mecanismos de trabajo social comunitario y reinserción ciudadana
para el caso de delitos que no hayan tenido repercusiones tan costosas para la
sociedad. Brindando estas facilidades, y en conjunto con la provisión de
servicios de entrenamiento técnico y salud médica dentro de penales y cárceles,
MPT espera que el Estado no se vuelva un criminal más al momento de encarcelar
a un ciudadano.
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| La situación en las cárceles es deplorable |
Defensa
de los Derechos Humanos
El foco en este rubro estará
orientado hacia las poblaciones más vulnerables, cuyo canal de denuncia más
efectivo en los últimos años ha sido la Defensoría del Pueblo. No es casualidad
que más peruanos confíen en esta institución (57% de confianza frente al 16%
del Poder Judicial). El plan de la actual ministra es otorgarle un rol más
protagónico a la Defensoría, implementando las iniciativas que provienen de
este organismo como es el caso del sistema de prevención de conflictos sociales
o la ley de búsqueda de desaparecidos.
Sobre estas bases recaerán los
esfuerzos por cambiar las formas de hacer justicia en el país. A pesar de que
el reto en este sector es inmenso, es esperanzador que se orienten todas las
políticas al objetivo de lograr un mayor bienestar ciudadano. Y es que todo parece indicar que si la actual
ministra no logra reformar el sistema de justicia peruano, al menos tratará de
vengarlo.
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