Hay millones de formas de hacer publicidad, las propagandas son infinitas y duran más que el programa de televisión o las canciones que transmiten las emisoras radiales. Mas no conozco ese arte así que simplemente diré: Necesitas ir a ver la obra Pequeños exilios en el CCPUCP y debes de hacerlo ya! Solo quedan dos fechas (martes y miércoles a las 8:00 p.m.) Es seguro que te lo agradecerás por siempre, ya que serás parte de un viaje extraordinario.
Sin embargo, no encuentro en mí las palabras para describirlo y es por ello que serán Sebastián Ramos y Romina López (actores del elenco) quienes nos cuenten un poco de su experiencia.
¿Qué es Pequeños Exilios para ustedes?
S: Es todo un proceso. Es un proceso que arrancó el año pasado en abril. Es un viaje, donde primero experimentamos con la técnica de Lecoq, que ya conocíamos por las clases con Alejandra Guerra (la directora y profesora de la Facultad de Artes Escénica de la PUCP), pero que llevamos más a fondo. Exploramos los bufones, con las sensaciones y como crear a través de las pulsaciones internas, lo más profundo, lo más real. También hubo una clase de chamba testimonial, hablamos de nosotros mismos, encontramos nuestra esencia, lo más particular (movimientos particulares, formas de hablar) y lo llevamos al extremo. Así comenzamos a crear nuestros personajes, pero el definirlos,caracterizarlos, hacerlos brillar es mano de Alejandra que nos ayudó también en las relaciones entre personajes.
¿Ustedes le dieron el nombre de Pequeños Exilios?
S y R: No.
S: En realidad empezó como nosotros mismos, nosotros actores queriendo hacer una obra de teatro. Empieza en una mesa, sentados, pensando en la obra que vamos a hacer. Cada uno (cada actor) con una esencia particular, uno duda, otro es impulsivo, apasionado, neutro. Pero no queríamos otra obra de actores en busca de una obra. Entonces, encontramos una particularidad en todos y esta es la necesidad de hacerlo (una obra), que te falta para hacer eso.
R: La necesidad de apartarte del todo para recién emprender un viaje para ti, para encontrarte y saber qué te falta. Y en el camino encuentras personas que tienen la misma necesidad, eso hace que se junten y emprendan un viaje, eso es Pequeños Exilios. El viaje a..
¿Creen que este proceso ha originado un cambio en ustedes?
R: Fue un proceso doloroso, tocó varias cosas que no tenía en cuenta, aunque sabía que estaban dentro de mí. De las que no era consciente. Dejarte llevar por tus impulsos y crear a partir de eso. Traer del subconsciente a la conciencia todo lo que yo inconscientemente tapaba. Pasar el umbral, mostrar debilidades y no sentirme débil al mostrarlas.
¿Por qué ver Pequeños Exilios?
R: Te puedes identificar con cada situación, exilio, es lo
más íntimo y primitivo. Sentirse solo y que no perteneces al resto, el tener un
vacío que no puedes llenar porque no sabes cómo hacerlo.
S: Van a ir a ver personajes que abren su corazón. Tienen
miedo, pero quieren entregar algo a los demás. Compenetrarse con la sinceridad.
Y por el lado del espectador respondería a la pregunta que les hice así: Porque tiene voces que se atreven a hablar fuerte y claro. Porque en este tiempo nos hace falta ese exilio al que tememos, encontrarnos a nosotros en todas nuestras dimensiones y saber que aquello puede abrir las puertas del universo. Aquel universo que es nuestro, que nos espera con un ticket en mano para que empecemos el viaje.
El exilio no es sinónimo de soledad, si estás atento descubrirás a más personas emprendiendo el mismo viaje y gracias a ellas también te descubrirás a ti. Si simplemente no quieres más filosofías acerca del auto descubrimiento, ya quemaste todos los libros de auto ayuda que tenías y ya no quieres pensar más, anda a ver Pequeños Exilios. Porque está lleno de dimensiones, porque no puedo darle una sola definición, porque es mejor que la veas a que te cuenten.
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