Venezuela: Marcha de esperanza

Escribe: Mario Rivera 

La tensión es grande. Para el día de mañana, martes 18 de febrero, se ha convocado una nueva marcha, y a pesar de las amenazas, el nuevo líder de la oposición, Leopoldo López, ha confirmado su asistencia. Su posible captura por parte del oficialismo, ha incrementado la incertidumbre a niveles impensados, y ha puesto la mirada de mundo entero en este evento.

Días atrás, mediante un emotivo video, Leopoldo López convocó una marcha hacia del Ministerio del Interior y Justicia, al cual hace alusión como “el símbolo de la represión y persecución del gobierno”. La idea central es llevar las peticiones del pueblo venezolano a la tiranía establecida. Las peticiones son las siguientes:

• Aclaración de la responsabilidad del Estado en los homicidios ocurridos el 12 de febrero.

•  Liberación de todos los ciudadanos, especialmente a los jóvenes, que han sido perseguidos y están siendo torturados.

• Cese a la represión y la persecución de lo que es un derecho de todos los venezolanos, el derecho a protestar.

• Desarme de grupos paramilitares y grupos colectivos, responsables de homicidios y la inseguridad.

Asimismo, es un hecho que el sentimiento con respecto a las muertes del miércoles pasado sigue latente. El mismo Leopoldo López lo remarca al pedir que la vestimenta sea blanca, y al afirmar que la caminata será en conjunto hasta cierto punto. De ahí, él caminará solo. Es consciente de su posible captura, pero su respuesta se resume en una frase “Ahí estaré para dar la cara”. Enfrenta la posibilidad de ser encarcelado, diciendo que ahí se encontrará, para asumir esa persecución y esa decisión infame por parte del Estado. Arenga finalmente a sus compatriotas con la responsabilidad de construir un futuro mejor, pues “están en el lado correcto de la historia”

En el preámbulo de este suceso tan importante en la historia de Venezuela, han ocurrido dos hechos que incrementaron la tensión el día de hoy. Uno, fue la denuncia del partido Voluntad Popular contra la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DIM). Los primeros fueron relatando cómo la DIM allanó la sede de su partido en Altamira. Según se lee en su cuenta de twitter, “provocaron daños materiales y apuntaron con armas de fuego a sus dirigentes”. Un episodio más del abuso del oficialismo.

El segundo, tuvo un carácter más internacional. El canciller Venezolano, Elías Jaua, confirmó la expulsión de tres diplomáticos estadounidenses (cuentan con 48 horas para abandonar el país). Cabe resaltar que esto es consecuencia del comunicado emitido el pasado sábado por el secretario de estado de EE.UU. John Kerry. En este comunicado, expresó su preocupación por las olas de violencia. Además, según declaraciones del propio Jaua, se pidió iniciar un diálogo con la oposición, dejar en libertad a todos los detenidos y se advirtió que el arresto de Leopoldo López podría causar muchos problemas y consecuencias internacionales. El canciller venezolano tildó a esto como un acto de intromisión de EE.UU., y actuó como se detalló líneas arriba.

Es importante observar que estas tensiones giran alrededor del gran evento de mañana, y de la figura de Leopoldo López, símbolo de la oposición al chavismo. La actitud del gobierno muestra preocupación, por los continuos allanamientos y respuestas extremas cuando se trata el tema. Una frase importante, que resume la trascendencia del momento, es la que dio Diego Arria, ex presidente del Consejo de Seguridad de la ONU “La economía está cercana a estallar, la marcha del 18 de febrero y el apoyo a Leopoldo López los aterra, es la tormenta perfecta para el colapso de la dictadura”. La marcha de mañana nos llena de esperanza, la esperanza del inicio de una nueva Venezuela.

Pd: Si te gustó este artículo, síguenos en fb: www.facebook.com/vozactual