Es el día en que naciste, aquel día en que eres igual a todos los demás porque aún no conoces los prejuicios, no haces clasificaciones y no conoces las expectativas de la sociedad. Entonces te permites llorar, reclamas aquello que te es primordial para satisfacer tus necesidades y cuando lo consigues te calmas y duermes tranquilo. Hasta podría decirse que duermes feliz, ya que según la Real Academia Española la felicidad es el “Estado de ánimo que se complace en la posesión de un bien” o la “Satisfacción, gusto, contento.” Es así como tu primer día en el planeta Tierra aprendes que para encontrar la felicidad necesitas ir en busca de “algo” y poseerlo.
Si nos remontamos en la historia y llegamos a Grecia encontraremos que Aristóteles ya tenía sus propias conclusiones. Él decía que la felicidad es encontrar el fin propio de cada uno. Pero, ¿Cómo poseer nuestra misión en la vida si no la conocemos? Por ello nos da una clave más y dice que busquemos en el alma más que en el cuerpo. Lo cual no significa, dejar de lado los bienes exteriores y el cariño humano. Por otro lado, en las revistas podemos encontrar otros conceptos de felicidad como: “4 maneras de lograr un maquillaje perfecto” en Cosmpolitan, “Los secretos de profesionales para una piel perfecta, pestañas largas, mejillas rosadas” o “Sin artificios: trucos expertos para mejorar sin mentir” en Elle, “Abdomen más fuerte en solo 17 días” o “Consigue un cuerpo de Playa” en Men´s Health. Y estos últimos consejos están al alcance de tu mano y con maravillosas imágenes que no podrás rechazar.
Los seres humanos buscamos la felicidad a lo largo del tiempo, nos reinventamos, tratamos de cambiar las reglas del juego e investigamos continuamente como hacernos felices. Un ejemplo claro que nos brinda la revista El Centinela es que en la década de 1980, se cuadriplico el número de estudios sobre la felicidad. Estos concluían que las personas que sufrían alguna tragedia o problemas tenían los mismos niveles de bienestar emocional que los que no, que eventos como ganar la lotería hace feliz a la persona por un promedio de seis meses y que la afluencia de dinero no cambiaba el estado de las personas por mucho tiempo. Es por esta búsqueda que actualmente tenemos nuevos manuales de vida al alcance y personas dedicadas a escribirlos y darnos conferencias. Por ejemplo, Luminita Saviuc, escritora, conferencista y bloguera de Purpose Fairy dedicada a inspirar a otros, nos cuenta cuales son las 15 cosas a las que debemos renunciar para ser felices; Pilar Sordo, nos habla del miedo a crecer; David Fischman, de La alta rentabilidad de la felicidad y si nos gusta lo clásico siempre podemos probar con los proverbios chinos.
La realidad es que 700 mil personas tienen depresión en el Perú y el 80% de ellas se suicidan, según el diario Perú 21. La realidad es que Robin Williams, quien trajo a Patch Adams a nuestras vidas se asfixió, la realidad es difícil estar satisfechos con lo que tenemos, la realidad es que muchas veces miramos al otro para comparar ¿vivimos para los demás? Querida sociedad ¿tengo que escoger entre el dinero y lo que quiero al terminar el colegio? ¿Seré feliz si tengo más dinero, un cuerpo perfecto, amigos de mentira? ¿Puedo ser de plástico como la canción de Rubén Blades? La realidad es que muchas veces preferimos utilizar una pantalla perfecta como presentación antes que a nosotros tal cual. Entonces me pregunto, ¿dónde puedo hallar la felicidad?Pd: Si te gustó este artículo, síguenos en fb: www.facebook.com/vozactual
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