Escribe: Gonzalo Vásquez
Si Susana Villarán bebió algún trago en las celebraciones por el nuevo año, fue definitivamente un trago amargo. Al menos así lo indica el balance de su gestión municipal presentado por la Comisión de Transferencia de la Municipalidad de Lima. Pero mientras unos se van, otros llegan, y en este caso llega un personaje que –luego de unos años en política— al parecer está aprendiendo a pronunciar sus primeras palabras: Luis Castañeda Lossio. En el presente analizaremos brevemente los resultados del mencionado documento, así como de las expectativas que genera la entrada de Castañeda al sillón municipal de esta Lima, que en los siguientes cuatro años no será ni gris ni verde, sino amarilla.
Hasta la vista, Susy
El nuevo y la ex |
El pasado 31 de diciembre se presentó en conferencia de prensa el informe final de la Comisión de Transferencia, hecho a partir del documento de Rendición de Cuentas elaborado por la gestión de Susana Villarán el 20 de diciembre. Antes de revisar sus resultados objetivos—que no dejan nada bien parada a la saliente alcaldesa—, vale detenernos un momento en lo que los actores involucrados (Solidaridad Nacional y la ex alcaldesa) dijeron al respecto.
Patricia Juárez, teniente alcaldesa electa por Solidaridad Nacional, y Alfredo Saavedra, regidor de este partido, no se quedaron “mudos” ante la situación en la que al parecer se encuentra la municipalidad. Señalaron, respectivamente, que el principal reto de la municipalidad es sanear la economía, decidir qué hacer con los seis mil trabajadores que se han incrementado en la planilla de la Municipalidad, y que el PLAM 2035[1] presentado por Villarán no es un proyecto culminado, sino un simple power point. Definitivamente son acusaciones fuertes del partido que asume el cargo.
¿Y qué dijo la tía Susy? En su despedida, desmintió todas las acusaciones y defendió que su gestión deja US$ 1.500 millones en ejecución de obras, 60% mayores ingresos y la calificación como la segunda municipalidad con mejor capacidad crediticia en América Latina. Durante su gestión, a Villarán se le criticó muy poco por cuestiones de corrupción y malos manejos de dinero, mas tuvo muchos problemas en cuanto a ejecución, con proyectos muy sonados pero accidentados como el desalojo de la Parada, el épico llenado con arena de La Herradura o la implementación del Corredor Azul.
Una reciente encuesta realizada por Datum en diciembre muestra que la desaprobación de la gestión municipal habría llegado a 77% en las últimas semanas. He aquí lo referido al trago amargo, pues en 2011, una aún desconocida (en materia política) Villarán iniciaba con aprobación de 45% y una desaprobación de 18%, casi similar al 20% que la aprobaba en los últimos días del 2014. Además, el “balance general” fue calificado como malo por 37% de los encuestados y como pésimo por el 23%. Sin temor a equivocarse, podemos afirmar que los números finales son incluso peores que los alcanzados por el San Simón este año en el descentralizado (?).
¿En qué momento se jodió Lima?
El informe señala que la Beneficencia Pública tiene una deuda de, nada menos que, ¡57 millones de soles! Además, la Empresa Municipal de Mercados (EMMSA) se encuentra en situación de quiebra y requiere una inyección de 15 millones de soles. Según el equipo de transferencia, donde además de los mencionados funcionarios del partido del Sol, fue partícipe el popular “huevoduro”, Fernán Altuve. Así, existiría una quiebra institucional de 1,550 millones por todas las contingencias. Con respecto a los gastos en sueldos y obligaciones, como señaló Perú21, dichos pagos se incrementaron en 400% durante la gestión.
"yo no robo, ni hago obra" (?) |
Por otro parte, también se postula en el documento que el Puericultorio Pérez Araníbar tiene capacidad para 1200 personas y actualmente solo 220 menores se encuentran acogidos, dada la mencionada Beneficencia quebrada. Por otra parte, de 19 obras marcadas como gestionadas, solo 5 se han culminado y 5 ni si quiera se han iniciado. El informe ha entregado a la Contraloría para evaluar posibles actos de corrupción e irregularidades, lo cual era un punto fuerte de Fuerza Popular. Susana respondió: “Lima tiene resultados y solo los ciegos no los quieren ver y los sordos no quieren oir.” ¿Y los mudos?
Mudo, es hora de que “hables” en la cancha
Hombres de pocas palabras (?) |
No busco hacer leña de la Susy caída, sino mirar hacia adelante en cuanto al futuro de la capital. Castañeda Lossio, que juramentó el 1ro del presente mes en el Teatro Municipal de Lima, entró con fuerza al nuevo cargo, recordando en su discurso que tomará una serie de medidas que buscarán mejorar la calidad de vida del ciudadano. El electo alcalde seguirá por la senda que lo llevó a un buen grado de aprobación en sus pasadas gestiones, hacer obra. Esperemos que con menos controversia en la obtención de fondos para dichas obras.
El mudo pisó fuerte, dejando sin efecto la disposición de parar las obras en la Costa Verde y dándoles continuidad durante el verano. Una medida arriesgada pero que muestra autoridad. Emape señaló que el presente mes se liberarán dos los tres planificados carriles para alivio de los veraneantes y conductores. Además, anunció un nuevo metropolitano desde Javier Prado hasta la avenida Habich, así como la culminación de túneles a San Juan de Lurigancho que quedaron inconclusos en su anterior gestión.
Lima tiene un nuevo alcalde dispuesto a hacer obra. Queda por comprobar la autenticidad de los desbalances de la gestión saliente, pero también queda ejecutar y guiar esta ciudad tan complicada con criterio y de manera más transparente. Apoyo a Enrique Cornejo en la sugerencia (casi obligatoria) de no contratar funcionarios vinculados a Comunicore para evitar escándalos (que definitivamente habrán) en este nuevo periodo. Felizmente nuestro nuevo alcalde no es conocido por ser bocón, aunque en este país uno nunca sabe.
[1] Plan Metropolitano de Desarrollo Urbano de Lima y Callao
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